¿Tienes pérdidas de orina cuando ríes o toses? Toma medidas ahora

INTIMINA talks! – sidebar | | Clara De Santiago

Muchas de nosotras hemos pasado por esto: reírnos despreocupadamente con los amigos cuando de repente ¡vaya!, una pequeña pérdida de orina. Hemos tenido que pedir perdón, dejar la conversación a medias y usar el bolso para cubrirnos mientras intentábamos ir sigilosamente al cuarto de baño. Aunque esto le ha pasado a muchas mujeres en algún momento, tener pérdidas frecuentes puede ser señal de algo más grave.

¿Cuál podría ser la causa de las pérdidas?

Las pérdidas a corto plazo pueden estar causadas por una infección del tracto urinario, ciertos medicamentos o incluso por estreñimiento. Si te ha pasado esto de forma regular durante un tiempo, puede que sufras de algo llamado incontinencia de esfuerzo. Esto puede dar un poco de miedo, pero es el término oficial para las pérdidas de orina después de toser, estornudar, reír o levantar algo pesado.

¿Qué es la incontinencia de esfuerzo?

La incontinencia de esfuerzo es uno de los cuatro tipos principales de incontinencia urinaria en mujeres. Normalmente ocurre cuando se debilitan los músculos del suelo pélvico. Cuando estos músculos no son tan fuertes como deberían ser, pierden su capacidad de controlar los músculos del esfínter. Normalmente sólo relajamos estos músculos de forma consciente al utilizar el inodoro. Si tienes un suelo pélvico debilitado y, por ejemplo, toses, se crea una presión en el abdomen que oprime la vejiga y los músculos del suelo pélvico no son lo suficientemente fuertes para contener la orina.

Las mujeres suelen sufrir sus primeras pérdidas durante el embarazo o después del parto, cuando los músculos del suelo pélvico se estiran y se debilitan. También pueden aparecer más tarde debido a cambios hormonales en el organismo, sobre todo cuando llega la menopausia, que provocan que se debiliten los músculos de la pelvis.

¿Qué puedo hacer si creo que tengo incontinencia urinaria?

Aunque las pérdidas pueden provocar vergüenza y puede resultar algo difícil de hablar, debes saber que no eres la única con este problema. Millones de mujeres en todo el mundo tienen problemas de pérdidas, pero muchas no buscan ayuda. Sin embargo, la buena noticia es que la incontinencia de esfuerzo se puede tratar de forma efectiva, a menudo sin necesidad de cirugía ni de medicamentos. Lo importante es actuar en una fase temprana, por eso, habla con tu médico en cuanto notes pérdidas.

¿Qué tratamientos hay?

Para la incontinencia a corto plazo por problemas de estreñimiento o de medicación, por ejemplo, tu médico te ayudará a resolver el problema subyacente. Si te diagnostican estas pérdidas como incontinencia de esfuerzo debido a un debilitamiento del suelo pélvico, probablemente la primera recomendación del médico será comenzar unos ejercicios del suelo pélvico, llamados ejercicios de Kegel. Sin embargo, si no se tratan estas pérdidas durante un largo periodo de tiempo, la cirugía puede convertirse en la única opción.

¿Cómo pueden ayudar los ejercicios de Kegel?

Los ejercicios de Kegel son simples ejercicios de contracción y relajación de los músculos del suelo pélvico. Cuando éstos están fuertes, podemos controlar cuando nuestro cuerpo debe liberar la orina. Para realizar estos ejercicios de una manera más eficaz, puedes usar ejercitadores de Kegel, que son pequeñas esferas con peso que añaden resistencia a tu rutina de ejercicios; o dispositivos inteligentes que te indican cuándo contraer y relajar los músculos. Tu médico podrá darte instrucciones sobre la técnica correcta de ejercicios de Kegel. Mientras, te recomendamos que leas esta guía para principiantes. Son fáciles de hacer, de bajo riesgo y tan eficaces que son la solución más recomendada por los médicos para la incontinencia urinaria leve.

Si estás leyendo esto y tienes pérdidas, ¡es el momento de hacer algo al respecto! No estás sola y nadie tendría que vivir con pérdidas. Pueden solucionarse. Las pérdidas no son algo de lo que avergonzarse y, una vez que decidas tomar medidas, detenerlas suele ser muy sencillo.

Por favor ten en cuenta que los consejos ofrecidos por Intimina pueden no ser apropiados para tu caso en particular. Consulta siempre con tu médico si tienes preocupaciones específicas relacionadas con tu salud.