Casos en los que no están recomendadas las copas menstruales

Numerosos estudios científicos independientes como este, publicado en la revista Lancet Public Health, fruto de la revisión de los datos de 43 investigaciones científicas previas, más una encuesta realizada a 3.319 mujeres, revelan que las copas menstruales de silicona de grado médico son el producto menstrual más biocompatible, saludable, seguro, eficaz, higiénico, ecológico y rentable que las compresas y los tampones.
Sin embargo, el uso de copas menstruales se desaconseja si se sufren determinados trastornos de salud o en determinadas circunstancias. ¿Cuáles son? ¿Qué protector menstrual recomiendan los expertos en esos casos?
¿Cuándo son incompatibles las copas menstruales?
Alergias
Se calcula que entre un 2% y 7% de la población es alérgica al látex, material que compone algunos productos íntimos como preservativos, juguetes sexuales y copas menstruales. La alergia al látex incluye síntomas que van desde leves (picazón, enrojecimiento, urticaria ) hasta graves (como la anafilaxia, que puede causar una fuerte hinchazón en la garganta e impedir la respiración).
Para prevenirla, lo mejor es utilizar copas menstruales de silicona de grado médico (también llamada quirúrgica, porque se usa en marcapasos, prótesis, catéteres, etc.), un material biocompatible (compatible con los tejidos corporales), inocuo para el organismo (no desprende partículas tóxicas ni provoca que el cuerpo la rechace), hipoalergénico (no provoca alergias) y no poroso, por lo que previene el crecimiento de bacterias y hongos, disminuyendo el riesgo de infecciones vaginales, urinarias y anales.
Hipertonía del suelo pélvico
La hipertonía pélvica es una afección caracterizada por un exceso de tono y tensión muscular del suelo pélvico, que afecta a la micción (dificultades para orinar, vaciado incompleto de la vejiga, aumento de la frecuencia urinaria, dolor al orinar), defecación (estreñimiento, dolor al defecar), penetración (dispareunia o dolor en los genitales causado por las relaciones sexuales con penetración) y uso de productos íntimos (dolor al insertarse una copa menstrual, tampón, ejercitadores del suelo pélvico o juguetes sexuales).
Endometriosis
La endometriosis es una enfermedad crónica, progresiva e incapacitante, sin causa conocida ni tratamiento definitivo, que afecta (al menos) a una de cada diez mujeres. Esta afección se caracteriza porque células similares a las del endometrio (mucosa que recubre el interior del útero) se reproducen en otras partes del cuerpo (el ovario y el útero, en el 75% de los casos), causando síntomas como dolor abdominal y/o pélvico cíclico (por lo general, durante la ovulación), dismenorrea (menstruaciones dolorosas), dolor durante y después de las relaciones sexuales, problemas reproductivos (infertilidad/esterilidad), sangrados irregulares y/o abundantes y trastornos intestinales y urinarios, entre otros.
Algunos profesionales no recomiendan el uso de copa menstrual si se padece endometriosis, porque además de resultar incómoda y dolorosa si se sufre amenorrea, la retención de la sangre menstrual dentro del cuerpo puede empeorar sus síntomas.
Vulvodinia
La vulvodinia o dolor vulvar es una afección crónica e incurable, caracterizada por un dolor o ardor intenso en la totalidad de la vulva o en una parte de ella, que dura más de tres meses y convierte actividades cotidianas como caminar, sentarse, orinar o introducirse una copa menstrual en algo insufrible y doloroso, de ahí que no se aconseje su uso.
Vaginitis hormonal o atrófica
Como explicamos en este artículo, las copas menstruales son el protector menstrual más recomendable durante la perimenopausia, porque reducen el riesgo de sufrir trastornos característicos de esta fase (como infecciones urinarias y vaginales, dermatitis vulvar y sequedad vaginal), nos permiten observar nuestro flujo menstrual para detectar anomalías y podemos usarlas durante 8 horas, sea cual sea el volumen de nuestra regla.
Sin embargo, el descenso drástico de los niveles de estrógenos que se produce durante la perimenopausia, puede causar vaginitis hormonal o atrófica, un trastorno que consiste en el adelgazamiento del tejido vaginal, inflamación de las paredes vaginales y poca lubricación, que pueden causar ardor o dolor al orinar, sangrado leve tras las relaciones sexuales y la inserción incómoda o dolorosa de productos íntimos, como juguetes sexuales, tampones y copas menstruales, por lo que estas no son aconsejables.
Enfermedad pélvica inflamatoria
La enfermedad pélvica inflamatoria (EPI) es una infección de los órganos reproductores femeninos causada por la propagación de bacterias desde la vagina al útero, las trompas de Falopio y los ovarios, que, por lo general, es causada por una ITS (como la clamidia o la gonorrea), y en casos más infrecuentes, por procedimientos como una biopsia, la inserción de un DIU, el parto o un aborto. No se recomienda usar la copa menstrual si se sufre EPI (ni tampoco cuando existen otro tipo de ITS o infecciones ginecológicas en general), hasta la curación total, ya que pueden interferir con el tratamiento, prolongar el tiempo de curación y aumentar las molestias (en el caso de que la infección cause dolor).
Cervicitis
La cervicitis o inflamación del cérvix o cuello uterino (un trastorno relativamente frecuente, ya que el 50% de las mujeres la sufre en algún momento) puede causar dolor (durante las relaciones sexuales, inserción de tampones y copas menstruales), de ahí que se aconseje no usarlos hasta el fin del tratamiento. Además, aunque no cause dolor, si su origen es una ITS, es mejor esperar hasta que la infección haya desaparecido totalmente.
Procedimientos ginecológicos
Después de ciertos procedimientos ginecológicos, como biopsias, histeroscopias, conizaciones cervicales o cirugías, se aconseja no usar copas menstruales hasta que la zona se haya recuperado totalmente, porque pueden interferir en el proceso de cicatrización, aumentar el riesgo de infecciones y causar dolor o molestias.
Cicatrices ginecológicas
Se desaconseja el uso de copas menstruales cuando se tienen cicatrices y secuelas como queloides (crecimiento excesivo del tejido de la cicatriz, que causa picores, irritación y dolor), adherencias y granulomas (que pueden provocar dolor y pérdida de elasticidad y movilidad), resultado de intervenciones ginecológicas (como una episiotomía, tratamiento de fibromas uterinos o un aborto), ya que pueden aumentar las molestias y el dolor.
Prolapso de órganos internos
El prolapso es la caída de uno o varios órganos pélvicos (útero, cúpula vaginal, vejiga, uretra, intestino delgado y recto) causada por la debilidad o estiramiento del suelo pélvico, que puede provocar que el órgano descienda hasta la abertura vaginal, en cuyo caso, usar copas menstruales puede ser incómodo y empeorar sus síntomas.
Uso de dispositivos intrauterinos (DIU)
El DIU (anticonceptivo intrauterino o sistema de liberación intrauterino) es un pequeño dispositivo con forma de «T» que se coloca en el útero para impedir embarazos, con un hilo consistente en pequeños filamentos (de unos 2 o 3 cm de longitud) que parten desde su base hacia la parte superior de la vagina, para comprobar su posición y eficacia, y facilitar su extracción por el ginecólogo.
Aunque el DIU y la copa menstrual son compatibles, hay que tener cuidado al extraer algunos modelos para no tirar de los filamentos del dispositivo uterino (una posibilidad que no ocurre con modelos como la Lily Cup One o la Lily Cup Compact, porque tienen un anillo externo para facilitar la extracción y no necesitas introducirte los dedos), así como romper el vacío o sellado de la copa menstrual antes de extraerla, para evitar la succión del DIU (algo bastante improbable, pero no imposible), siguiendo las instrucciones que damos en este artículo. No obstante, hay muchas mujeres que, por elección personal, prefieren utilizar un protector menstrual alternativo.
La mejor alternativa a las copas: las bragas menstruales
El producto menstrual más recomendado en estos casos es la braga menstrual, pues es el protector (solo por detrás de las copas menstruales) más saludable, higiénico, eficaz, cómodo y respetuoso con el medio ambiente, siempre que cumpla con determinadas especificaciones.
Es el caso de Bloom, una braga menstrual de algodón orgánico ultrasuave, con tecnología antibacteriana ®RUCO-BAC HSA CONC y certificado OEKO-TEX®, un material biocompatible, hipoalergénico (no provoca alergias), suave (no causa eccemas ni rozaduras), bactericida (elimina bacterias), fungicida (elimina hongos), antiacariano (interrumpe la cadena alimentaria de los ácaros del polvo) y antimicrobiano no migratorio (inhibe el crecimiento de microorganismos como bacterias, hongos y virus).
El certificado OEKO-TEX® también implica que en los materiales de fabricación de las bragas menstruales Bloom no hay productos químicos nocivos, por lo que son una alternativa más segura (y libre de toxinas) a compresas y tampones (que, por otro lado, son uno de los productos íntimos que más vaginitis irritativa y dermatitis vulvar provocan, debido a algunos de sus componentes, como perfumes y adhesivos plásticos).
Además, el algodón es 100% orgánico, es decir, que ha sido cultivado sin OGM (organismos genéticamente modificados), pesticidas ni otros productos químicos, de ahí que sea más ecológico, a lo que se suma que, cuando se desecha, es menos dañino para el medio ambiente.
Por otro lado, el hecho de que la braga menstrual Bloom tenga una vida útil de varios años al ser reutilizable, y que su volumen de capacidad sea de hasta 20 ml de flujo menstrual en cada uso (el equivalente a 4 tampones y entre 2 y 4 compresas), supone que el volumen de basura que genera sea muy inferior a los kilos generados por los otros dos protectores (incluyendo plásticos) y que resulte más económica y rentable a medio plazo.

Brenda B. Lennox es el seudónimo de una escritora con varios premios literarios a su espalda. La máscara que le permite mostrar su lado más salvaje en textos eróticos que destilan crudeza no exenta de humor negro y poesía. La firma que avala su compromiso con la sexualidad y la salud femenina en artículos para medios como Volonté o Intimina.